martes, 16 de diciembre de 2025

Memeto abyssi

Una de las cosas que convierte estudiosos en autores (vale divulgadores) es la identificación de niveles adecuados de explicación, renunciando expresamente a la explicación completa. No es posible explicar nada de forma completa, ni siquiera es posible leer todo lo que se ha escrito sobre el tema en que andamos interesados. Siempre hay otro libro, otro artículo, alguien que profundizó en tal o cual detalle, una forma distinta de mirar el tema.

Las personas dedicadas a la enseñanza basan ese truncamiento de la profundización en el “nivel” de sus estudiantes. La profesora de infantil explica el ciclo del agua al nivel que pueden entender sus chiquis, mientras que en el aula universitaria de ecología se cuenta a otro nivel. La existencia de los estudiantes es una limitación (te impide ir más allá) pero también una bendición, te marca los límites que no debes traspasar.

Ponerse en modo autor hacia un público no cautivo, como es el estudiantado, ni siquiera bien definido, hace patente el problema de la profundidad ¿dónde paras de documentarte y comienzas a regurgitar?

Para que el resultado tenga valor, la regurgitación debe incorporar un grado suficiente de mezcla y digestión como para que el producto final sea interesante, cuente una historia cautivadora, al menos para algún segmento del público que acabe accediendo él. Pero hay que recordar que siempre habrá alguien que podrá hacer la historia más profunda. Aunque sea de forma no buscada, yo creo que ese es el papel de Francis en Naukas, sus charlas nos dicen: memento abyssi 😉

Foto de aquí
 

 

2 comentarios:

Juan Carlos (@ApuntesCiencia) dijo...

Entro por aquí para rendir pleitesía a Francis Villatoro, el rey de la divulgación hard. Ciencia sin anestesia, con todas sus dimensiones y rigor. ¡Gracias por divulgar para científicos!

Joaquín Sevilla dijo...

Claro que sí. Espero que se haya entendido mi comentario como una alabanza :-D