Estos días se ha anunciado el acuerdo al que ha llegado el Gobierno con Micosoft para ponerle Windows a los ordenadores que se han de instalar en las aulas (proyecto conocido con el discutible nombre de "escuela 2.0").
Esta decisión está generando un buen montón de reacciones (por ejemplo esta o esta, que están muy bien), especialmente por la traición a los ideales del software libre y la firma con el gigante de las tendencias monopolísticas.
Desde luego que es inevitable incorporar software a la enseñanza: a nadie se le ocurriría hoy dibujar con tiralíneas en vez de con Autocad o hacer estadística con calculadora en vez de con SPSS. O si, porque hay alternativas de código abierto para ambas aplicaciones (y otras alternativas propietarias también). Además cualquiera sabe el programa específico que se usará dentro de 10 años; quién nos iba a decir que el Word Perfect desaparecería. O sea que hay que incorporar software, pero no está claro cuales son los programas que hay que escoger.
Desde el punto de vista docente, sea cual sea el programa utilizado, hay que hacer un esfuerzo para mostrar lo general, la forma de trabajar basada en la informática, las posibilidades técnicas, las variantes entre unos programas y otros (o sea que el profesor debería manejar, siquiera sea mínimamente otros además del utilizado).
Entre las asignaturas del G9 teníamos dos de este tipo "Meteorología con hoja de cálculo" y "Estadística con SPSS". Sin duda el enfoque adecuado es el primero (aunque en el 99% de los casos se usara el MS-Excell), de hecho el segundo hubo de cambiarse el año que varias de las universidades discontinuaron sus licencias campus del SPSS.
En cuanto al papel institucional la decisión es más complicada, y mucho más para el sistema operativo. Desde el punto de vista puramente reflexivo lo de Microsoft no me hace gracia... cosa que escribo desde mi Windows XP, al que me sento atado por la comodidad de la herramienta utilizada a diario. Llevando el argumento a mis costumbres podria empezar a discutir sobre el "estandar de hecho" y el extraordinario poder beneficioso de los estándares. Justo para evitar el tipo de esclavitudes como la que yo siento con Windows sería importante que la alfabetización informática de los niños fuera más abierta que lo que ha sido la de los "inmigrantes digitales". En contra de la opinión del presidente de Hispalinux, un arranque dual puede ser una buena solución para esa apertura de mente, ahora que eso complicaria más las cosas a los profesores. La formación en TICs del profesorado, de forma generalizada, ni está ni se la espera, según podemos deducir de la ausencia total de este tipo de competencias en los nuevos planes de estudio de Magisterio (como bien comenta Celes), pero eso ya es otra historia para otro día.
Esta decisión está generando un buen montón de reacciones (por ejemplo esta o esta, que están muy bien), especialmente por la traición a los ideales del software libre y la firma con el gigante de las tendencias monopolísticas.
Desde luego que es inevitable incorporar software a la enseñanza: a nadie se le ocurriría hoy dibujar con tiralíneas en vez de con Autocad o hacer estadística con calculadora en vez de con SPSS. O si, porque hay alternativas de código abierto para ambas aplicaciones (y otras alternativas propietarias también). Además cualquiera sabe el programa específico que se usará dentro de 10 años; quién nos iba a decir que el Word Perfect desaparecería. O sea que hay que incorporar software, pero no está claro cuales son los programas que hay que escoger.
Desde el punto de vista docente, sea cual sea el programa utilizado, hay que hacer un esfuerzo para mostrar lo general, la forma de trabajar basada en la informática, las posibilidades técnicas, las variantes entre unos programas y otros (o sea que el profesor debería manejar, siquiera sea mínimamente otros además del utilizado).
Entre las asignaturas del G9 teníamos dos de este tipo "Meteorología con hoja de cálculo" y "Estadística con SPSS". Sin duda el enfoque adecuado es el primero (aunque en el 99% de los casos se usara el MS-Excell), de hecho el segundo hubo de cambiarse el año que varias de las universidades discontinuaron sus licencias campus del SPSS.
En cuanto al papel institucional la decisión es más complicada, y mucho más para el sistema operativo. Desde el punto de vista puramente reflexivo lo de Microsoft no me hace gracia... cosa que escribo desde mi Windows XP, al que me sento atado por la comodidad de la herramienta utilizada a diario. Llevando el argumento a mis costumbres podria empezar a discutir sobre el "estandar de hecho" y el extraordinario poder beneficioso de los estándares. Justo para evitar el tipo de esclavitudes como la que yo siento con Windows sería importante que la alfabetización informática de los niños fuera más abierta que lo que ha sido la de los "inmigrantes digitales". En contra de la opinión del presidente de Hispalinux, un arranque dual puede ser una buena solución para esa apertura de mente, ahora que eso complicaria más las cosas a los profesores. La formación en TICs del profesorado, de forma generalizada, ni está ni se la espera, según podemos deducir de la ausencia total de este tipo de competencias en los nuevos planes de estudio de Magisterio (como bien comenta Celes), pero eso ya es otra historia para otro día.
4 comentarios:
Gracias por la referencia Joaquín. Desde luego que no estoy ni en un extremo ni el otro, ya que habitualmente trabajo con windows, pero también lo hago con programas libres y me parecen estupendos. Pero desde luego en estas polémicas hay bastante de artificial y de pose progresista en el caso de la apuesta por el software libre.En una sociedad como la nuestra, tan competitiva, lo que es bueno y efectivo para el usario triunfará. También estoy de acuerdo contigo en lo referente a los estandares, dichos estandares cambian con el tiempo sino saben adecuarse al usuario. Lo importante es que los profesores tengan claras las ideas respecto a cómo enseñar mejor a sus alumnos con metodologías más participativas y constructivistas, independientemente de las aplicaciones informáticas que utilicen. Un saludo
Gracias a ti que nos mantienes al día de tantos avances en tecnología educativa (entre otras cosas). la verdad es que esto del software es un problema complicado. En cualquier caso se hace camino al andar, lo peor es no hacer nada y que la escuela siga con la tiza redonda como mayor progreso.
Microsoft (M$) traduce sus productos al chino, aunque en china casi todo son copias piratas. ¿pol qué?
Para que cuando compren (antes o después lo harán) compren Microsoft.
Luego la oferta de M$ es marketing y manipulación de infantes (como si fueran chinos).
Eso me parece razón suficiente para buscar alternativas.
Desde Luxemburgo y Ubuntu (que mi hijo pequeño de 11 años instala y controla sin problemas)
Jesús Nieto
Sin duda que MS, y muchas otras empresas, hacen esfuerzos por "acostumbrar" a sus productos a los alevines de clientes. De hecho el concepto de "licencia campus", que nos permite a las universidades disponer de software legal a costes muy ajustados se basa en esa estrategia. Los jóvenes ingenieros que hayan formado con el Catia, el Autocad o lo que sea, luego lo prescribirán en sus empleos.
Lo que pasa es que ese efecto es inevitable, a una cosa u otra te vas a acostumbrar, y el primero que usas que te marca especialmente.
Por cierto, prometo hacer un esfuerzo estas navidades e instalarme un linux para tener una opinión de primera mano.
Gracias por el comentario, un saludo
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