En el BOE de esta mañana se vuelva a bajar el sueldo de los funcionarios. En esta ocasión se busca la estratagema de eliminar la parte de sueldo que se cobra en navidad con el nombre de "extra", como si ese término designara algo que no es parte del sueldo en si mismo. En las declaraciones públicas se anunció esta bajada de sueldo como temporal, sin embargo en lo regulado por el BOE tal temporalidad no aparece, es una bajada de sueldo significativa y permanente.
En realidad no se de que nos extrañamos. El sueldo de los funcionarios no ha subido nunca. En el mejor de los casos, cuando la economía funciona a pleno rendimiento disfrutamos de ligeras pérdidas respecto de las subidas de precios, pérdidas que se vuelven severas cuando las cosas no van tan bien y tremendas cuando van mal. Los datos que ilustran esta entrada los había publicado ya con motivo de la anterior bajada (también comenté otro informe específico de profesores de universidad en Navarra).
No me resulta fácil de entender que es lo que pretende una sociedad de las personas que contrata a su servicio cuando la única expectativa laboral que les propone es perder poder adquisitivo con los años. Hay quienes se aferran a al amor propio y el sentido del deber para no perder la motivación. Es una loable actitud que comparto, y que es la mayoritaria en cuerpos de la administración en los que el contenido del trabajo es de por si muy enriquecedor (como los profesores de universidad). Pero ni es general ni puede ser infinita.
Las personas que no tienen la suerte de tener trabajos tan motivadores por su propio contenido se sienten legitimadas a ajustar su trabajo a su sueldo: si te bajan la remuneración levantas el pistón, ¿quien podría recriminarte por ello? Se entra así en un pernicioso lazo de realimentación en el que los trabajadores se sienten con derecho a echar un cafelito (de más), sus jefes directos lo comprenden y comparten, los usuarios se molestan por la pérdida de calidad del servicio y los jefes del kiosko (los políticos) se sienten legitimados a bajar el sueldo de nuevo, a descontar cafelitos. Luego diremos que lo público no funciona. Y es verdad, unos trabajadores que no temen el despido inminente no se dejan apretar las clavijas de forma indefinida. Es mucho mejor subcontratar el servicio a una empresa que, además de pagar sueldos aún menores, disponga de la amenaza del despido para eliminar los cafelitos.
No me creo que esa sea la única política de "recursos humanos" posible, ni que la desaparición de lo público sea el final necesario de esta aventura, pero desde que tengo uso de razón no he visto otra cosa (véanse los datos, no es sólo una sensación). Pero tampoco se me ocurre nada realista que hacer para invertir esa tendencia. Personas que me quieren me dicen que me deje de fríos racionalismos y que vaya a más manifestaciones, pero ¿de verdad se va a cambiar así una tendencia de más de 30 años? Cualquier sugerencia será bienvenida.
12 comentarios:
¿Incluye complementos por productividad y otros que pueda haber? No sé en los demás casos, pero en los profesores de universidad estos complementos pueden ser una parte importante del sueldo.
No, no incluye complementos. Sería la comparativa entre la persona que toma posesión en un momento con quién la toma en otro. Eso es lo que permite una comparación más homogénea. En mi opinión los complementos corresponden a otra cuestión que es la de la "carrera profesional", cómo progresa uno en el puesto en el que está y qué expectativas razonables tiene de crecimiento. Es gracias a esos complementos de productividad y antigüedad que se mantiene (y hasta crece ligeramente) el poder adquisitivo de muchos profesores universitarios. Supongo que en otros colectivos ni siquiera existe este mecanismo bastardo de compensación de la permanente bajada de sueldo
Si ahora hay complementos y antes no había la comparación será homegénea, pero poco indicativa. En el profesorado universitario ha sido, creo, deliberado el pasar paga del sueldo fijo a los complementos. En sí, esto no es mala idea.
Pero, como dices, lo interesante será saber de los otros colectivos, cuyos complementos sospechamos que no han compensado suficientemente la parte fija.
He encontrado tu blog a través del de Pseudópodo.
EStoy con el comentarista anterior. Si en esos datos no se incluyen los complementos que realmente se pagan no se puede saber cuanto pierden "en la práctica" los funcionarios. Por ejemplo en la secundaria tras las huelgas del 88 hubo una subida real de los suelos (sin poder dar muchos datos, pero por lo que yo recuerdo). Fue entonces cuando se introdujo el pago de sexenios ligados a la formación, que no existían antes.
Entiendo que para poder comparar realmente utilices los datos que usas(si nos metemos en complementos la cosa puede ser complejísima) pero de ese modo no estamos hablando de lo que realmente cobran los funcionarios.
(Gran blog el de Pseudópodo)
Todo depende de que es lo que realmente queremos comparar. Los complementos se adquieren con el tiempo (trienios, quinquenios, sexenios, ...), así que la persona que toma posesión hoy respecto de la que tomó posesión hace 30 años empieza con un 40% menos de sueldo, y eso es así. Otra cosa es que con el paso de los años, la primera persona incremente su sueldo con los años más deprisa que la segunda, por esos complementos. Pero esa es una cuestión compleja y, especialmente, es otra distinta de la que comento, que es el sueldo al ingreso en el cuerpo.
Es verdad que las grandes protestas corporativas (profesores de secundaria, médicos, jueces, ...) se han resuelto con algún tipo de complemento, lo que subía el sueldo a los que ya llevaban años dentro.
La verdad es que ya va siendo hora de acometer una reforma de la función pública que homogeneice y de sensatez a todo esta colección de parches que se ha ido montando con los años.
No todos los complementos vienen con el tiempo. Las CCAA suelen complementar el sueldo de los profesores de universidad simplemente por serlo. Desde luego que son los menos.
Suscribo lo que dices de acabar con los parches. El sueldo de un profesor de universidad puede tener hasta 10 parches distintos:
-Trienios
-Sexenios de investigación
-Quinquenios de docencia
-Complemento de su comunidad autónoma automático
-Complemento de su comunidad autónoma ligado a la investigación
-Complemento de su universidad ligado a la investigación
-Complemento de su universidad ligado a la docencia
-Complemento de su universidad ligado a méritos de investigación excepcionales
-Complemento por cargo académico
-Remuneración por cursos de postgrado
-Otros que pueda haber
Todo esto se arreglaría si los departamentos y su personal pudieran ser financiados y pagados de acuerdo con su producción científica, no según reglas de café para todos o casi todos.
Aporto unos datos rápidos y sus fuentes. A veces, cuando el nivel de detalle es abrumadoramente complejo vale la pena dar un paso atrás y tratar de captar el gran número. Para ello he ido a la Agencia Tributaria. En el último informe que se puede descargar aquí podemos encontrar datos de la masa salarial de los empleados públicos de los últimos años (página 29). Probablemente pueda extenderse esta serie hacia atrás consultando informes más antiguos. Estos son los datos en mm de euros
2006 - 72.371
2007 - 78.361
2008 - 85.883
2009 - 91.501
2010 - 90.064
Ya tenemos el numerador. Ahora necesitamos un denominador: el número de funcionarios que han percibido esos salarios. He acudido al INE (la EPA) y he realizado las medias para cada año de los 4 trimestres del número de asalariados del sector público.
Estos son los datos en miles de personas:
2005 - 2.864
2006 - 2.882
2007 - 2.913
2008 - 2.958
2009 - 3.062
2010 - 3.129
2011 - 3.190
Dividiendo una serie entre la otra me encuentro ésto:
2006 - 25.109
2007 - 26.900
2008 - 29.027
2009 - 29.882
2010 - 28.778
Que se podría interpretar como una aproximación a los "salarios" medios de los asalariados públicos. Según éstos datos, del año 2006 al año 2009 el salario medio de los empleados públicos subió un 19%. para luego caer en 2010 un 3,7% de media. El incremento acumulado entre 2006 y 2010 fue de un 14% mientras que el IPC creció en un 12,3% acumulado si no me equivoco...
No tengo una opinión muy clara sobre el hecho en sí. Sólo arrojo los datos por si pueden ser de utilidad en la discusión.
Un saludo,
Pedro
Pedro, los datos son interesantes, pero habría que comprobar si estás comparando peras con manzanas.
Lo digo porque en el informe pone masa salarial pública, y eso puede entenderse como empleados de empresas públicas (que paga el estado) y similares.
Es decir, no sólo funcionarios.
Lo flipais, cocináis más los datos que en el propio INE. No comparáis peras con manzanas, comparáis peras con chorizos.
Todo esto os hace perder fuerza, razón y consideración.
@Naeros
Si alguien tiene datos mejores me encantaría conocerlos. Es posible que exista un sesgo, pero en cualquier caso es consistente y la tendencia me parece clara.
Un saludo
Pedro, creo que Naeros tiene razón. Los datos que das son interesantes, pero se sabe muy bien lo que hay detrás de ellos.
Por un lado no todos los "empleados públicos" son "funcionarios", hay también personal laboral e incluso una tercera categoría (ahora no encuentro el enlace pero hace unos días comentaba alguien sobre esto en El País).
También se podrían esconder ahí complementos de alto cargo (supongo que eso se incluye en la masa salarial global), de forma que el aumento del cociente que das podría esconder un aumento de altos cargos y no un aumento del sueldo medio de los funcionarios.
Los datos de sueldo a la toma de posesión están en el BOE y son claros. En algunos cuerpos (como el de profesores de universidad) hay complementos que generan un incremento con el tiempo apreciable, como indicaba José Luís. Pero en muchos otros apenas existen esas vías de aumento.
Reconciliar el promedio de masa salarial con la disminución reiterada del sueldo de los funcionarios es un interesante problema. Si tengo ocasión preguntaré en algún sindicato (que es dónde se supone que hay personas dedicadas a este tipo de estudios a tiempo completo).
Muchas gracias por los comentarios. Un saludo.
Solo por apuntar un detalle, los datos del INE también se corresponden a empleados públicos, no sólo funcionarios.
Los datos que doy son globales y desde luego son compatibles con que algunos empleados públicos hayan perdido poder adquisitivo a cambio de que otros lo hayan ganado más que proporcionalmente, lo cual nos sitúa en otro debate: ¿qué ha ocurrido con las diferencias salariales entre los distintos tipos de empleados públicos?. ¿Han absorbido los conserjes lo que dices que han perdido los titulares?. Yo no lo sé.
Un saludo
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