viernes, 9 de noviembre de 2012

Desgobierno universitario por responsabilidad homeopática

Supongamos una universidad muy seria, llena de grandes científicos bien repartidos entre todos los órganos de gobierno. Como ningún grupo humano es homogéneo, aparece un profesor convencido de algo acientífico (como la efectividad curativa de la homeopatía más allá del efecto placebo o la calidad y profundidad del mensaje de Emilio Duró). Siguiendo con las hipótesis, el profesor díscolo propone una actividad universitaria relacionada con su creencia. En los pasillos y en la cafetería todos comentan sobre lo absurdo de la propuesta y lo indignante de que "nuestra institución" avale semejantes paparruchas. Un observador externo pensaría que dicha actividad nunca llegaría a ponerse en marcha. Nada más lejos de la realidad.

Se convoca una reunión del área de conocimiento del profesor atípico, hay 15 personas en la reunión (por ejemplo), y ninguno se anima a enfrentarse directamente con el proponente. Pero si es un compañero nuestro, además hace unos años hizo unas investigaciones muy interesantes, cómo le vamos a hacer pasar el mal trago, bueno y al que hable en contra también, generar mal ambiente en el área no es buena política, etc. etc. Con la tranquilidad que da pensar que hay muchísimas aprobaciones que quedan por delante, el área de conocimiento aprueba la actividad por asentimiento, sin siquiera votar.

A las dos semanas hay Consejo de Departamento. En el orden del día viene la aprobación de la "indignante" propuesta anticientífica. A la hora de presentarla, el Director recuerda que viene con el aval unánime del área de conocimiento. Nadie abre la boca y queda aprobada por unanimidad del Departamento. A la salida algunos comentan sobre la barbaridad que acaban de aprobar, y se comisiona a un lanzado para que llame a un Vicerrector y le insista en que tiene que parar una iniciativa que ellos mismos acaban de aprobar.

A los pocos días la Comisión de Títulos Propios (pongamos por caso, dependerá de la actividad de que se trate) da el visto bueno a una propuesta que viene con el apoyo unánime del Departamento. Unas semanas más tarde el Consejo de Gobierno, con el voto a favor del Rector y casi todos los Vicerrectores aprueba la infumable iniciativa. Hubo un Vicerrector (el que recibió la llamada) que insistió en votar en contra y casi ocasiona un incidente diplomático con el Director del Departamento implicado que, lógicamente, defiende los acuerdos tomados por el Consejo al que representa.

Aunque pueda parecer exagerado, esa viene a ser la forma en que se toman muchísimas decisiones importantes en la universidad, diluyendo la responsabilidad de un órgano en el siguiente y de ese en el siguiente y así hasta que en la decisión final no queda un átomo de sensatez. Exactamente igual que en el preparado homeopático no queda traza de la sustancia original tras las sucesivas diluciones. Y en este caso también creemos que cuantos más órganos de gobierno, controles y normas (más diluciones al fin y al cabo), más potente y efectivo es el resultado final (más democrático, representativo y consensualdo).

La figura la he cogido de aquí

8 comentarios:

Unknown dijo...

Yo creo que no se puede describir mejor, es absolutamente cierto que las cosas funcionan asi. Has descrito lo que ocurre en el proceso de aprobacion de algo no deseable. El mismo mecanismo, pero con el sentido contrario, funciona con otras cosas que seria deseable aprobar y no se puede.

Anónimo dijo...

De acuerdo con el fondo de la cuestión,. Se nos presenta a todos los que debemos decidir sobre
cuestiones científicas en la universidad.
Propuesta a debate: No podríamos seguir procedimientos similares a las revistas o evaluaciones? requerir revisiones independientes anónimas externas.

Joaquín Sevilla dijo...

Dr. Segovia, un honor que alguien tan conocedor de este mundillo coincida conmigo. Abrazos!!

@Anónimo, ponía el ejemplo de las cuestiones acientíficas, y en concreto la homeopatía, por hacer un símil entre una cosa y otra. Pero en realidad es una crítica a la forma de tomar decisiones en general.

En el caso de lo científico, la propuesta de tener un comité más serio para decidir me parece estupenda (doble ciego o como sea)

Anónimo dijo...

¿Es casualidad que Emilio Duró imparta una conferencia en la UPNa? O, ¿hay alguna nueva propuesta homeopática en marcha?

Joaquín Sevilla dijo...

No se si habrá una nueva propuesta homeopática, lo que si se es que fue la charla (prevista para hoy) de Duró lo que me inspiró en parte esta entrada...

Anónimo dijo...

No entiendo el por qué de este enfado. La psiquiatría tiene los mismos fundamentos científicos que la homeopatía (es decir, ninguno) y no he visto a nadie rasgarse las vestiduras por el hecho de que se presente como una disciplina científica. Al menos la homeopatía no hace daño a nadie ni sus tratamientos son impuestos por la fuerza a quien no los quiere.

Joaquín Sevilla dijo...

No es enfado, en esta entrada la homeopatía es un ejemplo, lo central es la forma de tomar decisiones en la universidad.

Por cierto, no estoy de acuerdo en absoluto en la comparación con la psiquiatría, ni en que sea inocua la homeopatía.

Anónimo dijo...

Hola Joaquín,

Gracias por el comentario. Yo creo que la universidad es asi en general, la política (no el sentido política de partidos políticos sino de a quién conoces es a veces más importante que qué conoces) tiene mucho peso. Por ejemplo, a principios del siglo XX, en las mejores universidades del mundo la eugenesia se enseñeba como ciencia y ya sabemos todos cual fue el resultado :D.

Sobre la psiquiatría; es una pseudociencia sin ningún tipo de dudas. La idea de que lo que la psiquiatría denomina "trastornos" están causados por lesiones cerebrales o desequilibrios químicos en el cerebro es un bulo sin ningún tipo de base cientifica. Coge el caso de los antidepresivos, por ejemplo. Al igual que la homeopatía, los estudios mas completos que se han hecho sobre su eficacia demuestran que no son mejores que los placebos. La razon por la que se venden tanto es por la corrupción entre empresas farmaceúticas y psiquiatras. La psiquiatría tiene una historia vergonzosa de etiquetar como "enfermo mental" a todos aquellos que dicha disciplina ha considerado indeseables a lo largo de su historia. Si eras homosexual en los 1960s, eras un enfermo mental. Si lo eras a finales de los 70 en EEUU ya no lo eras, pero la OMS te consideraba uno hasta principios de los noventa, asi que en los países que usaban la definicion de la OMS, eras un enfermo mental. No soy homosexual, pero vamos, la manera en la que la psiquiatría trabaja no es científica. Se inventan trastornos en comités. Y se inventan teorías inverosímiles para justificar sus inventos; teorías que cambian constantemente cuando la evidencia científica no apoya dichos inventos. Mientras tanto, empresas farmaceúticas y psiquiatras hacen caja. La razón por la que pienso que la psiquiatría es mas nociva que la homeopatía es que los venenos de la primera no son inofensivos -causan muertes innecesarias todos los años- mientras que los de la segunda, agua azucarada, son completamente inocuos.