martes, 25 de junio de 2024

Actualidades comentadas

He entregado el último acta del curso y me he encontrado con mucho tiempo libre (o no ocupado con urgencias al menos) como resultado he estado un buen rato paseando por tuiter.Hay cosas que te llaman la atención como para merecer un comentario, otras te lo sugieren pero mejor no, o tiene demasiadas aristas para un puñado de palabras o resulta inconveniente por otras razones. 

A continuación dejo una versión algo más razonada de los comentarios:

Ciencia para políticas públicas, el CSIC publica, parece ser, informes con esa finalidad de vez en cuando y acaba de publicar 3, uno sobre el cielo oscuro, tema del que nos tienen bien sensibilizados desde el Planetario de Pamplona. No sé si esta irrupción pública del CSIC en el tema de la ciencia asesorando a la política es una respuesta al anuncio de la ONAC de la semana pasada o es pura casualidad. En cualquier caso parece un tema de moda... quizá ya estaba y como me interesa a mi lo veo en todas partes.
 
Comenta Eduardo Garzón el desplome del PIB argentino y hay que retuitearlo. En realidad no tengo información de primera mano, ni se mucho de cálculos de PIB, pero me resuena tanto que mi sesgo de confirmación no puede sustraerse a creerlo:"Pues ya tenemos la prueba del algodón que utilizan los economistas convencionales: el PIB de Argentina se ha hundido un 5,1%, situándose ahora a niveles de 2020, año desastroso por la pandemia. Es decir, las políticas de Milei son casi tan malas como una pandemia."
 
Javier Padilla refiere un artículo científico en el que se analizan los problemas de salud pública que está acarreando la prohibición de realizar abortos en Texas, muertes de adolescentes y anomalías congénitas. Es interesantísimo que se pueda evaluar el efecto, muy negativo en este caso, de una política pública. Pero si preguntamos a los legisladores, no tomaron esa decisión para que resultara práctica, sino movidos por principios morales fuertes, algo que los hace irrenunciables. En el famoso dilema del tranvía sobre las consideraciones éticas, estos señores creen que no hay que tocar la palanca (actuar contra embarazos inadecuados) aunque ello suponga que el tranvía arrolle unas cuantas chicas. (por cierto, que casi seguro que los legisladores son sobre todo señores y las damnificadas mujeres).
 
 
Las muestras del lado oculto de la Luna que traía la misión china Chang'e 6 ya están en la Tierra (https://www.microsiervos.com/archivo/ciencia/muestras-luna-change-6-ya-en-tierra.html ). Es una noticia muy comentada, y varios de los comentarios se congratulaban de lo que "hemos" conseguido. Lo hemos conseguido como humanidad, incluyéndonos todos en esa hazaña. Pero no siempre somos tan inclusivos. En qué situaciones somos "nosotros" y en cuales "ellos" es una interesante forma de entender mejor ese sesgo cognitivo que es el tribalismo. "Hemos ganado" o "han perdido" para referirse a los resultados de la selección de futbol son expresiones habituales. Mola mucho que la ciencia suscite ese sentimiento de comunidad universal, pocas cosas más lo hacen.
 
Iñako se despide del comité asesor de The Conversation con un precioso (y poético) artículo sobre el valor del conocimiento, el placer que proporciona adquirirlo y como se refleja en la lengua vasca. A ver si las tareas de gestión a las que se encamina ya hoy mismo no le limitan la poética.
 
Han cambiado la contabilidad oficial de citas, el JCR de Clarivate, y de forma bastante revolucionaria, añadiendo muchas revistas a la lista, lo que "mejora" a partir de este año los resultados de revistas que anteriormente estaban en cuartiles inferiores. Lo cuenta Francis en su blog.Esto es una "technicality" de un submundo de la ciencia que no le importaría a nadie si no fuera porque en esos datos se ha basado de forma casi exclusiva la evaluación de las personas dedicadas a la ciencia. Un trabajo puntuaba más en tu valoración dependiendo del cuartil al que pertenecía la revista en que se publicaba. 
 
Nos parece que este cambio introduce un agravio comparativo porque personas que publicaron antes o después en la misma revista tendrán "puntuaciones" distintas (el Q de la revista ha cambiado este año). La percepción de agravio comparativo es algo peculiar, se usa mucho para mantener notas bajas y suspensos en la clase, para no agraviar comparativamente a quienes "merecen" las notas más altas. Yo estoy intentando racionalizar esa percepción y llevarlo a una valoración más profunda de lo "justo". En el caso que nos ocupa, lo malo era el sistema de valoración. Cambiar el cómputo de los Q no es ni bueno ni malo, lo que es malo es evaluar algoritmicamente la calidad de las personas investigadoras, y más con unos datos sesgados de origen (la empresa Clarivate tiene sesgos de idioma y otros, bien conocidos de tiempo).Actualmente se está intentando ir a la raíz del problema y hacer un sistema que no caiga en ese necio automatismo (iniciativas Dora y Coara), pero claro, entonces el peligro es la discrecionalidad, tan proclive a la arbitrariedad y el amiguismo. Yo creo que merece la pena intentarlo.
 
Por último: "Israel mata en Gaza a 10 familiares de Haniyeh, líder político de Hamás, incluida su hermana". Porque matar a los familiares de un (supuesto) delincuente es normal. Ya lo de la justicia, los derechos humanos o los tratados internacionales otro día, si eso.

Y ese comentario irónico sobre lo horrible de la masacre que está teniendo lugar en Gaza cierra el repaso de la mañana. Estas injusticias tan flagrantes me producen daño físico, hacen que tenga que rodearlas (mirarlas con ironía, dejar de mirar...) si no quiero caer un una tristeza especialmente improductiva. La (relativa) liberación de Julian Assange que también es noticia de hoya va también en el paquete de las injusticias insoportables.
 
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miércoles, 19 de junio de 2024

Los males del sistema científico y su impacto en el doctorado

 Esta mañana he ido a la Universidad de La Rioja (la buena) invitado por el Consejo de Estudiantes para dar una charla basada en las ideas del libro "Los males de la ciencia". A pesar de ir con covid y dar la charla con mascarilla, todo ha ido bien, bastante público, muchas preguntas y comentarios al final, interés genuino en el tema. La charla como tal creo que no se ha grabado, pero hay un par de materiales:

El "teaser" que me han grabado de la UCC de la UR:

Las dispositivas de la charla:

sábado, 15 de junio de 2024

A propósito de Urania

Retomamos este verano las sesiones de música y estrellas (y poesía) que llevamos haciendo varios veranos (2021,2022 y 2023). La versión que comenzamos en unos días se llama "A propósito de Urania", por remontarnos a los griegos y recordar que tenían una musa de la astronomía (y de las matemáticas por extensión), y es que la ciencia no se puede considerar fuera de las humanidades en sentido estricto (otra cosa son las taxonomías varias que se hacen).

Por ahora tenemos programados: Lerín, 22 de Junio y Artajona 9 de agosto.



martes, 11 de junio de 2024

La política y lo epistémico

 "Los partidos políticos como agentes epistémicos colectivos".

Esta frase salió en una reunión ("Chatham house rule")  a la que asistí hace unos días. Ahora le doy vueltas a esta idea ilusoria (no creo que lo hayan sido en los últimos tiempos) pero ilusionante (puede ser una vía de futuro).

Si hay algo de valor epistémico, un esfuerzo de agregación de conocimiento experto sin eludir los valores asumidos ideológicamente, fue el "proyecto de país" de Sumar. Y ese proyecto ha sido atropellado por el día a día de la política más miserable, la que ha ido desgastando el proyecto hasta expulsar (ayer) a su visionaria impulsora (Yolanda Díaz).

Por otro lado, el ascenso de la extrema derecha es espectacular. Desde el momento en que el relato cultural permite aceptar sin vergüenza máximas contrarias a los derechos humanos, por un lado hemos perdido un suelo común que nos sirvió desde que se establecieron a la sombra de la segunda guerra mundial, y por otro se legitima un "ideario" maravillosamente palatable, lleno de lugares comunes, contradictorios entre sí, pero que resuenan extraordinariamente con aspectos muy primarios de la psicología humana. Casi todos se basan en el tribalismo: nosotros y ellos; los de aquí y los de allí, los de género definido y los otros, los de nuestra religión y las otras, los hombres y las mujeres, los trabajadores y los subvencionados.

Es difícil enfatizar suficientemente a qué velocidad se complejiza el mundo. Pensemos en lo que ha pasado en 4 generaciones:

  •  Mis abuelos (que nacieron en los 10 del siglo XX) vivieron una infancia muy parecida a la que se vivía en tiempos de Julio Cesar, y a lo largo de su vida los caballos y mulas se sustituyeron por bicis y coches, aparecieron los aviones, la radio, las grabaciones musicales, los inodoros,... 
  • La siguiente generación, mis padres, vieron vaciarse los pueblos e inflarse las ciudades, crecer las fábricas, pudieron comparase un coche, tener vacaciones, hijos universitarios y hasta una segunda vivienda en muchos casos. 
  • La tercera generación, la mía, empieza a vivir la una situación en la que ventajas e inconvenientes (del "progreso") se equilibran, vamos a la universidad, pero a una universidad masificada y cada vez menos abierta. Accedemos a trabajos y viviendas que son el orgullo de los abuelos pero que nos llevan a vidas aceleradas donde los hijos caben mal y, definitivamente, nada que no sea la familia nuclear tiene sentido. Tenemos coche, pero nos esclaviza. Tenemos trabajo, pero nos extenúa. Al menos podemos ir a cenar y viajar en vacaciones a la otra punta del mundo, podemos pasar 10 días con todo incluido que, aparentemente, justifican esa vida tensa. 
  • La cuarta generación, la de mis hijes, tiene claro que los beneficios del progreso no les compensan los perjuicios. Tienen ropa superbarata en megatiendas multinacionales, pero saben que su confección está llena de trabajo infantil y daño medioambiental. No necesitan estudiar sobre el calentamiento global porque en sus minipisos compartidos urbanos los veranos son evidentemente más insoportables .

En ese mundo complejo los análisis racionales son costosos, no están al alcance de los ciudadanos (que, recordemos, siguen viviendo unas vidas tensas, por decirlo suavemente). No es que no sepan (sepamos) distinguir el Consejo de la Comisión europeos, es que no diferenciamos gobierno de estado, o los tradicionales 3 poderes. La disonancia cognitiva que produce un mundo incomprensible y la evidencia de que "yo no soy tonto" es un caldo de cultivo excelente para las peores respuestas...

  • (1) Asume tu inteligencia sin miedo, la complejidad la han inventado unas personas que lo que quieren es dominarte, pero en realidad todo es muy sencillo. Mira el horizonte y determina tú mimo si la tierra es plana o no. Ante tus propias evidencias sensibles ¿por qué dejarse llevar por complejas "teorías"?
  • (2) ¿Quien está sirviendo en los bares o cuidando a los ancianos? Y mientras tus sobrinos en paro. ¿No es obvio que esas personas les quitan el trabajo a tus seres queridos? Los que dicen que tus parientes rechazan esos trabajos y que la inmigración es inexcusable son esos que quieren complicarte la vida. Juzga por ti mismo y verás como la respuesta es obvia.
  • (3) ¿Que no tienes gente para recoger las uvas o las fresas? Claro, están todos con la "paguita" y no quieren venir a ganarse la vida honradamente como siempre se hizo.


Si lo anterior es un buen marco explicativo (1), el ascenso de la ultraderecha tiene un componente sociológico, la complejidad social, y uno psicológico, la disonancia cognitiva que produce la dificultad de bregar con esa complejidad. O visto aún desde más arriba, se trata de un problema epistemológico: cómo gestionar mucha información, con diferentes grados de verosimilitud, e integrarla en procesos de toma de decisión de forma, si no óptima, cuando menos satisfactoria.

Y con esto se cierra el círculo volviendo a la frase que citaba al comienzo "los partido como agentes epistémicos colectivos". A ver quien le hinca el diente a ese problema en vez de a los compañeros de espacio ideológico.

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(1) marco explicativo, que no la verdad y toda la verdad, cosa a la que aspiran los filósofos y les lleva en demasiadas ocasiones a la parálisis por el análisis, imho.

Figura:  De trabajo propio basado en "Classical-Definition-of-Kno.svg" de la Wikimedia Commons en inglés, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=2012584

miércoles, 5 de junio de 2024

La factura de la luz de la luciérnaga

La universidad ha tenido la estupenda iniciativa de montar un espectáculo de monólogos (UpnaShow) que ha tenido un gran éxito de público. Mi participación fue un derivado del proyecto Ikuspegia energía en perspectiva. Se grabó en vídeo:

 

 

 

sábado, 1 de junio de 2024

"Eso no es ciencia, es opinión"

Ayer tuvimos un espectáculo de monólogos científicos en el teatro Gaztambide de Tudela. Profesores de la universidad de diferentes disciplinas nos preparamos 5 minutos de algún tema de nuestro ámbito de conocimiento y los contamos allí en un formato que busca ser ameno. El primer monólogo generó una reacción airada de una persona del público. Un sociólogo que hablaba sobre las formas en que se categoriza la violencia en la búsqueda de la paz hizo que una persona gritara "eso no es ciencia, es opinión" y se marchara de la sala entre gritos y aspavientos.

Nuestra reacción fue pensar que en cualquier auditorio un poco grande no es raro que haya alguien pasado de copas o con la cabeza en otro sitio. Pero pensándolo un poco mejor, en plena invasión de de Gaza por el ejército israelí y crítica (más que justificada en mi opinión) a este último, se podía leer la charla como una crítica a dicho ejército. Y si, por la razón que sea, uno empatiza con la violencia israelí, le puede resultar ofensivo escuchar una teorización sobre el mal que hay tras las violencias, sus tipologías y sus dinámicas internas.

Una de las conclusiones de los trabajos que contaba mi colega es lo pernicioso de "las escaladas". Algo tan obvio en el día a día que se le hacen coplillas (excelente la de Kiko Veneno "Si tú, si yo"). Sin embargo los sentimientos, el odio, el resentimiento, el anhelo de una venganza que sentimos como justa reparación, reniegan de esa fría consideración de que las escaladas son, cuando menos, inconvenientes.

La ciencia, como sublimación del pensamiento racional, busca conocimiento de validez lo más universal posible, basado en la mejor evidencia disponible, un conocimiento que no esté empañado por sentimientos, que valga el día que estamos furiosos, pero también el que estamos hartos de sufrir. En el contexto en que estábamos ayer, un marco teórico basado en el análisis comparado de decenas de conflictos humanos me parece mucho más valioso que el grito airado de un individuo enardecido.

Eso no quiere decir que los sentimientos deban esconderse o refrenarse, hay actividades humanas donde es materia prima esencial como la poesía, las artes en general. Esas actividades no buscan universalidad, habrá personas cuyo ánimo se conmueva con una pieza, pero habrá quien sienta indiferencia o hasta repugnancia.

Quizá la reivindicación del valor de los sentimientos, el empoderamiento de las sensaciones individuales, esté detrás del creciente negacionismo científico. "Con lo legítima que es la actuación de este ejército que me defiende de los terroristas que asesinaron a mi familia, vamos a creer ahora en categorizaciones de violencia", "Ahora que le sacaba un rendimiento aceptable a mis tierras he de dejar de utilizar no sé que productos por que unos urbanitas dicen que estamos quemando el planeta", y así en multitud de ámbitos, creándose incluso un discurso estructurado.

El negacionismo, la posverdad, el cerrar los ojos a la evidencia que no se alinea con mis sentimientos es un signo de los tiempos. Como especia, parece que nuestra gestión emocional no a avanzado al mismo ritmo que nuestro pensamiento racional y toda la tecnología (especialmente la bélica) que hemos sido capaces de desarrollar.
 

 

Una estrofa de "Si tú, si yo" de Kiko Veneno
 
Si tú no me hubieras dado con el despertador
yo no te habría dado con la lamparilla
si tú no me hubieras dado con el zapato
yo no te habría tirado el retrato a la cabeza
si tú no me hubieras dado con la cómoda
yo nunca te habría tirado el armario
si tú no fueras tan americano yo tampoco sería tan ruso

Y así estamos los dos en el hospital escayolados
en vez de estar haciendo el amor
tras de la tapia de un cine de verano