viernes, 28 de octubre de 2011

Ciencia abierta en la Universidad

Desde hace años hay un movimiento en favor del "software libre" del que todo el mundo ha oído hablar y al que muchas universidades apoyan institucionalmente (como declaración de intenciones cuando menos). Sin embargo el software no es un asunto central en la universidad (salvo en titulaciones de informática, claro), y en los que si lo son, la docencia y la investigación, apenas ha habido movimiento en la misma dirección.

En el ámbito de la docencia el camino "libre" parece marcarlo el Opencourseware del MIT, pero sobre eso ya escribí hace un tiempo

En cuanto a la investigación, no deja de ser sorprendente que la producción científica no sea "libre" en el mismo sentido que lo es el software libre. En las universidades el sueldo de los investigadores lo paga el estado, así como los recursos para la investigación (en gran medida), incluso la propia publicación de los resultados. Después, si quieres acceder a ella has de suscribirte a revistas científicas de pago, de muchísimo pago además. En todo el edificio de la ciencia pública hay un ladrillo, el de las editoriales, que es privado y que se ha hecho de oro en los últimos años. Parece que últimamente si que empiezan a plantearse actuaciones en esa dirección, como es el caso de los repositorios abiertos (para más información ver 1 y 2). Visto el éxito que ha alcanzado el proyecto ArXiv (que empezó casi como una broma) muchas instituciones se han ido sumando a la idea. En este sentido, el que la UPNA se apunte a esta iniciativa es una magnífica noticia.

Aún quedaría una cuestión más, que es la apertura de los resultados de la investigación de valor tecnológico, la reconsideración "abierta" del mundo de la propiedad industrial, las patentes. Sobre este asunto recomiendo leer innovación abierta y 10 mitos sobre las patentes. En todo caso, las actuaciones en este campo creo que exceden con mucho, al menos por ahora, del ámbito de actuación de una universidad aislada.

5 comentarios:

ptarra dijo...

Estoy completamente de acuerdo en lo que dices. Como sabes, durante unos años me gané las alubias gracias al software libre y todavía hoy, ya no desde primera linea de fuego, sigo utilizándolo en exclusiva por una cuestión moral. No me verás jamás utilizando Windows o un Mac por una cuestión de ética y coherencia personal. Al final el software no es más que una forma de conocimiento.

Inducir artificialmente escasez en un bien "no escaso" como el conocimiento es algo mezquino. El conocimiento debería ser totalmente accesible y libre y más aún el conocimiento generado con el esfuerzo colectivo, como es el caso.

Como ya dijo San Agustín: "Omnis enim res quae dando non deficit, dum habetur et non datur, nondum habetur quomodo habenda est." que traducido viene a decir algo así como: "Si una cosa no mengua cuando se comparte no es correctamente poseída si sólo se posee y no se comparte"

Un saludo

Anónimo dijo...

Las opiniones que aparecen en este blog suelen ser bastante reflexivas y de una elevada calidad; por eso quizás me ha sorprendido que esta entrada sea un tanto naif.
El argumento central parece que el sueldo de los investigadores es público y por eso los resultados deben de ser libres. ¿Cuantos sueldos de investigadores provienen de dinero público? ¿Deben publicar en abierto los investigadores cuyos sueldos son públicos y en acceso restringido aquellos cuyos sueldos no provengan de arcas públicas?
En una escala más amplia, ¿deben los bienes construidos con dinero público o gestionados con dinero público dar acceso libre a todos los ciudadanos?
Además de estas cuestiones de carácter global, hay algunas cuestiones de carácter particular sobre el acceso libre sobre las que parece planear una curiosa indefinición. No es lo mismo publicar en acceso libre en un formato tradicional (lo que se puede hacer sin mayor problema), que hacerlo en un medio creado ad-hoc o en un repositorio universitario, ni desde el punto de vista de control de calidad del producto ni de su difusión ni de muchas otras cuestiones implicadas.
Otra cuestión que me resulta cuando menos extraña es que cada vez haya más presión para que las Universidades y Centros de Investigación "valoricen" el resultados de sus investigaciones y que se conviertan en fuente importante de autofinanciacion y, por otra, parece que haya que regalar el conocimiento.
En resumen, aparentemente puede resultar difícil manifestarse en contra del acceso libre al conocimiento, de la misma manera que a una sanidad universal o el derecho a una vivienda digna o el derecho al trabajo, pero no dejan de ser declaraciones globales. Lo importante es cómo se articulan. En esto del acceso abierto quizás haya que empezar a preguntarse si realmente contribuiría a un progreso real del conocimiento.

Joaquín Sevilla dijo...

@Pedro
Vaya, no sabía de esa faceta socialista de San Agustín, no se que iba a pensar la Sgae de él ;-)

@Anónimo
Gracias por las alabanzas del comienzo de tu comentario. En cuanto a la crítica, tiene su parte de razón. Me parecía tan evidente el fondo de la cuestión (la conveniencia del acceso abierto al conocimiento) que no me he esforzado en argumentarlo (salvo la pequeña cosa del dinero público, que es algo que me parece escandaloso, pero que no deja de ser un tanto marginal a la cuestión). En la entrada hay unas cuantas referencias a sitios dónde está más argumentada la cuestión de fondo, pero me quedo como tarea hacer otro post en el que argumente de verdad el interés y la conveniencia (no solo la "moralidad" como dice Pedro) del acceso abierto. (Lo que no aseguro es cuándo)

Antonio Arias dijo...

La nueva Ley de la Ciencia, que entra en vigor en un mes, parece dejar resuelto el asunto con la previsión de su artículo 37 que dispone que todos los investigadores cuya actividad haya sido financiada mayoritariamente con los Presupuestos Generales del Estado están obligados a publicar en acceso abierto una versión electrónica de los contenidos aceptados en publicaciones de investigación (“sin perjuicio de los acuerdos en virtud de los cuales se hayan podido atribuir o transferir a terceros los derechos sobre las publicaciones”). Para su desarrollo, se encomienda a los agentes del Sistema el establecimiento de repositorios institucionales de acceso abierto.”
Tal como afirmas, es una paradoja que, hoy en día, casi toda la ciencia publicada esté financiada por cuantiosos fondos públicos y necesite “pagar el peaje” de editores comerciales para su divulgación internacional.
Un abrazo y disfruta de la metrópol ...

Joaquín Sevilla dijo...

Gracia spor la información, y por el sfuerzo de ponerla en 2 sitios. Con esto de la multiplicación de las redes cada vez es más difícil sabe acertar ;-)