sábado, 8 de febrero de 2020

López Otín, cien años de perdón, como robar a un ladrón


La Real Academia de Ciencias respalda a López Otín (El Comercio)

La Real Academia de Ciencias niega que López Otín cometiera fraude (El País)

La Real Academia de Ciencias respalda el valor científico de los estudios de López Otín (EFE)

La situación no es nueva, pero el afamado científico asturiano la trae a la más rabiosa actualidad. A Mendel no le salieron los resultados de los guisantes tal y como los publicó. La realidad era más sucia y el "embelleció" los resultados para que se entendiera mejor su teoría sobre la herencia. Galileo no hizo muchos de los experimentos que dice que hizo en sus textos, se quedaron en experimentos mentales que ayudaban a entender su teoría sobre el movimiento. Del mismo modo, López Otín "embelleció" (sic) sus gráficas, cometió "prácticas científicas inadecuadas que deberían haberse evitado".

Prácticas científicas en la frontera de la ética merecen un juicio social extremadamente diferente dependiendo de si el científico acertó o no. Si con esas actuaciones fraudulentas Mendel, Galileo u Otín hubieran defendido ideas que se probaron falsas, se les habría considerado malos científicos, fraudulentos, intolerables. Como acertaron con sus ideas, como sus conclusiones se han mostrado correctas en posteriores trabajos, el descrédito moral es mínimo. Pecadillos, errores metodológicos menores que en ningún caso deben menoscabar la grandeza del personaje.

Científicos que cometieron "errores metodológicos" mucho menores, pero que equivocaron su análisis y propusieron hipótesis o teorías que se probaron incorrectas merecen un reproche social mucho mayor. Me vienen a la cabeza Fleishman y Pons con su fusión fría, pero podemos poner ahí a todos los que llevaron a Langmuir a su idea de "ciencia patológica".

En el fondo no es nada diferente de lo que ocurre en otros muchas situaciones sociales, hay un chiste clásico que lo resume: el que roba una gallina es un chorizo, el que roba una cartera es un ladrón y el que roba cien millones es Don José. También es un clásico: quien roba a un ladrón tiene cien años de perdón. Quizá robarle a la ignorancia una buena teoría científica te otorgue cien años de perdón, un perdón necesario por haberla obtenido robando.

No seré yo quien pretenda contradecir las conclusiones de la Real Academia en cuestión sobre Don Carlos; pero se nos llena demasiado la boca de "método científico" y valores acrisolados cuando para esto de la apreciación moral de los incumplimientos de nuestros compañeros científicos, somos tan "cínicos" (o tan "humanos") como cualquier otro... como no podría ser de otra manera, por otra parte.


7 comentarios:

Alba dijo...

Como de costumbre la IGNORANCIA es MUY ATREVIDA...en primer lugar decir que el doctor Otin es asturiano es un craso error, pues aunque tenga la vecindad civil por residencia continuada en Asturias por más de 10 años,este hombre ha nacido en otro lugar,que si mal no recuerdo es Huesca...aunqueaun recuerdo bien su procedencia, ahora mismo.
Ya nos gustaría a los asturianos que tan insigne figura hubiera sido originaria de Asturias...
Por otro lado juzgar de forma tan taxativa unos hechos que simplemente fueron manipulaciones de pequeños errores de cálculo, que ya no digo cualquier investigador, sino cualquier trabajador puede cometer, cada día, en el desempeño de sus funciones, habida cuenta que nadie somos perfectos como dioses, creo que es situarse en las ANTIPODAS DEL RACIOCINIO y la mayoría de las veces, desde LA ENVIDIA, tan propia de los españoles, que hace que solo reconozcamos los logros de nuestros investigadores cuando están encumbrados en el extranjero o cuando ya están muertos.
Otro de los logros de este investigador,del que apenas se habla, es su calidad como persona y el apoyo que les da a los jóvenes investigadores que revolotean por su entorno...
Así que,por favor,antes de lanzar su boomerang contra alguien, infórmese primero...no vaya a ser que sea usted mismo quien reciba el palo...

Víctor Peña Dacosta dijo...

Bravo.

Unknown dijo...

dicen ....que la mujer del César además de serlo tiene que parecerlo ....jua.jua.jua

Joaquín Sevilla dijo...

"no vaya a ser que sea usted mismo quien reciba el palo..." ¿Es una amenaza?
Flipo con las pasiones que levanta el asunto.
Estoy bastante informado y mantengo mi opinión, que no es nada agrasiva ni taxativa, por cierto.

Juan Panisello dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Juan Panisello dijo...

Profesor, gracias por su opinión, que me suguiere la sigueitne reflexión: "método cientifico: ¿donde esta el limite y hasta donde podemos llegar?. Una esquizofrenia de resolución no pacífica."

Luis dijo...

Uf, no se que decir, no conozco el caso en profundidad, desconozco si es tan grave o no pero estoy contento de que salga bien de esta y no se menoscabe su prestigio o por lo menos no más; tengo buenos recuerdos de el, me dio alguna clase y alguna practica y escuchándole charlando con el nos pareció a todos un sabio y una gran persona