domingo, 12 de julio de 2009

El azar vence a la incompetencia

El principio de Peter es una de esas verdades del barquero extraordinarias. Lawrence Peter reflexionó a mediados de los 60 sobre lo extendido de la incompetencia en todo tipo de organizaciones hasta que se dió cuenta de la sencilla y general razón para ello: todo el mundo asciende hasta su nivel de incompetencia. Idea que convenientemente desarrollada, justificada y ejemplificada publicó en formato de libro en 1968, alcanzando notable éxito. Para quien no lo haya leído, lo considero altamente recomendable. Además es corto, de lectura fácil y divertida y muy revelador.

40 años después de ser enunciado, leo estos días que con herrmaintas informáticas actuales se han modelizado organizaciones e indivíduos creando un sistema en el que se puede probar en condiciones "de laboratorio" la veracidad del principio de Peter. Y no sólo eso, sino que también se pueden ensayar estrategias alternativas de promoción de empleados y medir la eficacia del resultado... Resulta que promocionar al azar es más efectivo que el tradicional sistema de promocionar al que lo hace bien en su actual puesto. El artículo completo se puede leer aquí, y además del interesante resultado per se, muestra la riqueza de la colaboración transdisciplinar; en este caso físicos y sociólogos.

2 comentarios:

RKincaid dijo...

Lo grave del principio de Peter es que al principio la gente se lo tomó como un libro de humor y resultó que estaba escrito completamente en serio. Es absolutamente cierto.

La evolución del principio de Peter es el principio de Dilbert, que dice que los empleados incompetentes son colocados en los puestos donde menos daño pueden hacer: en la dirección de la empresa.

En cualquier caso hay que ser muy cauto con los resultados obtenidos de esas modelizaciones: si los resultados confirman la teoría y se ven refrendados por el sentido común, perfecto, pero no sirven para nada. Si pronostican cosas extraordinarias...mmmm... ¡desconfía!

Un saludo

Joaquín Sevilla dijo...

Si, habrá que leerlo con cuidado antes de dar por buenos los titulares. El artículo es largo y plantea varios casos, la verdad es que aún sólo lo he hojeado en diagonal. Pero me parece muy interesante aunque sólo sea como anticipo.

Saludos