A pesar de la distancia me llega la noticia (Diario de Navarra) del comienzo de una campaña organizada con la intención de que se retire el WiFi de las escuelas.
Quizá ver que la Universidad Pública del lugar avale pseudoterapias sin base científica (aun con miles de personas protestando por ello) haya envalentonado a estos ciudadanos que, con todo su derecho, se organizan para hacer una petición a las autoridades; eso sí, basándose en falsedades y medias verdades.
Se han hecho centenares de estudios y decenas de metaestudios sobre la influencia en la salud de las radiaciones no ionizantes. De todas ellas hay estudios epidemiológicos desde su comienzo, que en el caso de la alta tensión se aproxima a los 100 años. Nunca se han demostrado los efectos nocivos que sí tienen las radiaciones ionizantes, y es que esa diferencia es fundamental.
Lanzar objetos contra las personas ¿es peligroso para las personas? Depende de los "objetos", enunciada así la pregunta uno está tentado de contestar que sí en cualquier caso, pero lanzarle a alguien una pelota de ping-pong, un ovillo de lana o una pluma no tiene ningún efecto (ni siquiera si le lanzo 500 pelotas de ping-pong), en cambio una bala, un tornillo o una piedra son "objetos" sin duda dañinos. Las radiaciones ionizantes nos golpean como balas (en miniatura), y producen daños en los tejidos que se pueden acabar reflejando en aumentos de la incidencia del cáncer (como daño principal). En cambio las radiaciones no ionizantes nos golpean como peloras de ping-pong, no producen ningún efecto significativo. Y vivimos rodeados de ellas: la luz del sol, la de las bombillas, las emisiones de AM y FM, las emisiones de televisión, los tendidos eléctricos (los de alta, media y baja tensión), los teléfonos móviles y el WiFi. Todas ellas son iguales (en lo fundamental) en cuanto a su interacción con las personas. De hecho, la más peligrosa de todas ellas es la luz visible natural, la procedente del sol, que lleva una componente ultravioleta (ionizante) que es responsable de no pocos cánceres de piel.
No hay coordinadoras anti bronceados veraniegos, aunque todos los veranos los dermatólogos recomiendan prudencia (y cremas) para tomar el sol y nos parecen unos rancios exagerados. No existen coordinadoras que propongan cerrar las emisoras de radio por su efecto sobre la salud (a veces sí por el contenido que emiten, pero esa es otra historia). Sin embargo se ha puesto de moda achacarle, primero a las antenas de telefonía y luego al WiFi, una malignidad considerable. Es cierto que la OMS incluyó esas radiaciones en un grupo de potenciales generadores de cáncer de los que se requiere más estudio, un grupo en el que ya estaban los polvos de talco o el café. Pero eso no es lo mismo que decir que producen cáncer, ni muchismo menos.
Bastantes dificultades está teniendo la escuela para incorporarse a la sociedad del conocimiento como para añadirle esta más. Sólo nos faltaba un argumento tan serio (aunque falso cual euro de madera) como la salud de los niños para que los profesores reticentes y los administradores cicateros frenen aún más la incorporación de internet en la enseñanza.
Por último, pero no menos importante, la falta de criterio de los medios de comunicación (del Diario de Navarra en este caso) para dar los argumentos de la plataforma por ciertos y publicitar este tipo de iniciativas me parece también lamentable.
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Si alguien quiere datos que apoyen las cosas que yo he dicho aquí tan categóricamente, puedo recomendar:
- Programa Escépticos de la ETB2 Escépticos sobre el tema
- Sobre la evidencia científica de la relación entre móviles y cáncer (Enchufados)
- Serie de entradas en Magonia sobre el tema (con enlaces a los estudios existentes)
- Vídeo de la charla de Iñaki Ucar y Julián Palacios en Amazings 2011
Lamentablemente, está la realidad por un lado, y por otro los "escépticos del wifi" (los hay de más variedades) que usan el "pensamiento crítico" para... acabar comprando soluciones contra sus temores. Naturalmente, también están quienes las venden. Apuesto algo a que detrás de esta campaña, a poco que se tire del hilo, están las buenas gentes de Vivosano, Geosanix, la HDO o la fundación para la Salud Geoambiental: las mismas gentes, en cualquier caso, como descubrí (no muy sorprendido, la verdad) en su día. http://brucknerite.net/2011/10/%c2%bfescuelas-sin-wifi.html
ResponderEliminarSi decides darte un paseo por los comentarios de mi artículo descubrirás el tipo de razonamientos que gustan de hacer los adeptos del terror electromagnético. Interesantes cuando menos. Impermeables a la realidad.
Muy interesante el artículo, y el trabajo de desliar y refutar los comentarios (alguno menos naïve de lo habitual) estupendo.
ResponderEliminarPor lo menos no dejar pasar incontestados estos ataques al sentido común y al conocimiento científico bien establecido.
Un gran articulo Joaquin la gente se deja influenciar en cuanto oye que algo es malo, de primeras la idea es quitarlo, la verdad como dice Iván tiene que estar alguien detrás por que Yo a la pagina de Anti WIFI llegue desde la de Geosanix, ellos Si, venden un teléfono inalambrico bueno, de bajas emisiones, lo que son es unos Farsantes, y lo que hace falta es mas Gente como Tu Joaquin, y todo el equipo de Amazings. Gracias por enseñarnos la realidad
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Borja. A ver si conseguimos que el sentido común se mantenga mínimamente.
ResponderEliminarMás escéptico que yo no creo que haya sido nadie,el problema del wifi no es el router o la antena que normalmente esta separada del periférico, sino de este mismo periférico, que se convierte en antena cuando envía datos, en el colegio os imagináis 25 portátiles emitiendo al mismo tiempo y encima de vuestro cuerpo, yo tengo aparatos de medición y llevo cinco años investigando ondas sobre todo las del radar y las wifi, y os sorprendáis de lo que pueden hacer, arboles muertos, una persona delante de un router wifi, y en la espalda un equipo de medir mide igual delante que detrás, el problema son los GHz cuanto más alto es más peligroso se vuelven, y emiten menos porque la penetración es mayor (encuentran menos resistencia), simplemente hay gente que se cree que Internet siempre ha llegado en wifi, Un principio de precaución no estaría demás, apartarse de la brasa hará que no te quemes, pero por desgracia es una batalla perdida quitarle a un niño un caramelo envenenado es casi imposible y menos si hay millones de niños..... y viajando por toda España, ayudando a personas con problemas de este tipo, que por lo que he leído, se dice que hay miles de estudios que no no perjudiciales, yo por desgracia, he encontrado más, y he encontrado de algunos de asombrosos y cerrados a cal y canto, yo toda la información que puedo contrastar y de todo el mundo, la divulgo, y hay algunas informaciones que me ponen los pocos pelos que tengo de punta, y solo veo un gran negocio, yo seguiré investigando, y trabajando de otra cosa ya que esto no da para vivir pero si que es mi compromiso.
ResponderEliminarun saludo
Si que me imagino la emisión de 25 portátiles, y la de los cables que los alimentan y los de los fluorescentes con los que se alumbran, y las de las emisoras de radio y televisión (porque si pones allí la radio se oye ¿verdad?). Hay muchas ondas de muchas frecuencias, algunas continuas y otras con su codificación. Todas no ionizantes.
ResponderEliminarLo de las mediciones delante y detras de una pesona, o el árbol muerto lo cuentas d euna forma anecdótica, con poca precisión, no tengo suficiente detalle para contestar, pero los estudios serios que conozco (y de los que tengo eferencia) insisten en la inexistencia de efectos nocivos. No se qué estudios has podido encontrar "cerrados a cal y canto", pero si los has encontrados los podrías divulgar.
No se cual es el gran negocio al que te refieres, el basado en realidades (la posibilidad de hablar por teléfono o de navegar por internet) o el basado en falsedades (teléfonos "bajos en emisiones").
En fin, me parece estupendo tu esfuerzo por documentarte, buscar estudios y formar tu propia opinión, pero piensa que no todo lo que se escribe (y se publica, y menos en internet) tiene la misma validez o está igualmente respaldado por datos experimentales bien medidos.
Un saludo