A propósito de la medida de la felicidad, que comentábamos hace unos meses, me hacen notar el curioso índice de democracia. Está resumido en la Wikipedia, y en Google hay más de 200.000 referencias al asunto; especialmente relevante el artículo dónde se explica con detalle.
Es un índice complejo, con cinco categorías principales (procesos electorales y pluralismo, libertades civiles, funcionamiento del gobierno, participación política y cultura política) que a su vez se componen de otras medidas, en total 60 indicadores. Curiosamente (o no tanto), toda esa complejidad se agrega en una nota final que da una clasificación, un ranking.
Ante una clasificación de este tipo lo primero es ir a mirar si los primeros y los últimos cuadran con la idea subjetiva que tiene uno sobre el tema, la democracia en este caso. Parece que si, Suecia gana con un 9,88 y el último es Corea del Norte con un 0,86. Bueno, bien; especialmente mirando otros puestos de la clasificación. Lo segundo es ver dónde queda uno: España ocupa un notable puesto decimoquinto con un 8,45. A partir de ahí ya viene o bien el morbo o bien la investigación, dependiendo de si uno se acerca al tema por pura curiosidad o profesionalmente. En la primera categoría (la del morbo) a mi me ha llamado la atención la posición de Italia, a punto de descolgarse de la categoría de "democracias plenas".
Con este caso empiezo a darme cuenta de que hay toda una categoría de temas que podríamos denominar medida de magnitudes sociales (o al menos magnitudes no físicas): la democracia, la felicidad, la calidad de vida (Schallock y Verdugo), la calidad de las universidades... Resulta que la medida de las magnitudes físicas es mi principal tema docente en la universidad (concretamente la "instrumentación industrial"), con lo que este tema vendría a representar un complementario cuando menos curioso. Veremos lo que va dando de sí.
Es un índice complejo, con cinco categorías principales (procesos electorales y pluralismo, libertades civiles, funcionamiento del gobierno, participación política y cultura política) que a su vez se componen de otras medidas, en total 60 indicadores. Curiosamente (o no tanto), toda esa complejidad se agrega en una nota final que da una clasificación, un ranking.
Ante una clasificación de este tipo lo primero es ir a mirar si los primeros y los últimos cuadran con la idea subjetiva que tiene uno sobre el tema, la democracia en este caso. Parece que si, Suecia gana con un 9,88 y el último es Corea del Norte con un 0,86. Bueno, bien; especialmente mirando otros puestos de la clasificación. Lo segundo es ver dónde queda uno: España ocupa un notable puesto decimoquinto con un 8,45. A partir de ahí ya viene o bien el morbo o bien la investigación, dependiendo de si uno se acerca al tema por pura curiosidad o profesionalmente. En la primera categoría (la del morbo) a mi me ha llamado la atención la posición de Italia, a punto de descolgarse de la categoría de "democracias plenas".
Con este caso empiezo a darme cuenta de que hay toda una categoría de temas que podríamos denominar medida de magnitudes sociales (o al menos magnitudes no físicas): la democracia, la felicidad, la calidad de vida (Schallock y Verdugo), la calidad de las universidades... Resulta que la medida de las magnitudes físicas es mi principal tema docente en la universidad (concretamente la "instrumentación industrial"), con lo que este tema vendría a representar un complementario cuando menos curioso. Veremos lo que va dando de sí.
A veces tengo la impresión de que me citas como a un toro con un capote, y en el momento que comento dices "olé". :)
ResponderEliminarSí. Es interesante el tema de las metricas en magnitudes no fisicas. El problema es que se trata de magnitudes invisibles e incluso ficticias, lo que en mi opinion crea dos graves problemas:
- construccion de metricas ad hoc para apoyar determinadas posturas.
- en el caso de índices aceptados y estandarizados la modificación o adaptacion de su definicion. Hace no mucho tiempo, por ejemplo se redefinió el concepto de "parado" con un efecto curiosamente favorable al gobierno. (Y se supone que el paro debería ser "fácil" de medir...)
No creo que haya que renunciar a medir todo lo medible, pero si que hay que tomar todo esto con muchísima cautela.
Un abrazo
Sorprende ver que tanto EEUU como Reino Unido están por detrás de España...
ResponderEliminarPara Naeros:
ResponderEliminar¿Realmente sorprende tanto que EEUU esté en este índice de democracia por detrás de España?
Pues no hay más que darse una vuelta por ambos países y comparar.
Vaya, es mi modesta opinión, claro.
De todas maneras, la diferencia entre ambas, es de 0,23, que, sobre 10, tampoco es que resulte muy significativa.
Es evidente que, con dos culturas tan distintas, unas cosas compensan otras.
Pero es bastante claro que, en los EEUU, hay una amplia parte de la población cuya participación, está excluida del "dêmos".
@RKincaid, no es que te cite directamente, pero sin duda que no dejo de recordar que ya hemos discutido (en el sentido sajón del término) previamente sobre la cuestión. Entiendo tu preocupación, pero cada vez estoy más convencido de que es un campo de investigación (la medida de variables no físicas) con mucho futuro e importancia.
ResponderEliminar@Naeros, gracias por pasarte por aquí. Sorprende especialmente porque la escala de medida está hecha desde esa cultura, y, como le preocupa a RKincaid, estas escalas tienden a deformarse un poco (o un mucho) en el sentido que le interesa a quien lo hace. Quizá esas posiciones sean una medida de calidad de la escala.
@Squirrowl, Es verdad que la diferencia numérica es muy pequeña. No se cual será la experiencia personal de haber vivido en ambos sitios...
El índice se compone de muchos elementos distintos, pero me sorprende que España esté por encima de EEUU en democracia. Allá eligen al presidente, a sus congresistas, eligen al fiscal, eligen los jueces, la comunidad elige al consejo escolar (que tiene poder ejecutivo), los ciudadanos pueden llevar propuestas para ser votadas a nivel municipal... Es una democracia con defectos pero mucho más participativa que la nuestra.
ResponderEliminarYo he vivido en ambos países y no me parece que aquí tengamos una democracia más avanzada, ni más activa, ni más participativa ni de lejos.
En cuanto a los excluidos... ¿que pasa aquí con los 4 millones de inmigrantes? ¿Qué pasa con la población gitana? ¿No hay excluidos aquí?. Exactamente igual que allí, en mi humilde opinión también.
La verdad es que no creo que el ranking sea significativo en posiciones casi consecutivas. Lo importante es el grupo en el que cada país cae.
Un saludo
@RKincaid
ResponderEliminarAllí votan mucho, es cierto. Y hacen muchos referendos a nivel local (junto a la elección de cualquier tipo de representante local, puedes encontrar hasta 21 consultas de cualquier cosa; por ejemplo, si debe de ser obligatorio que los lugares con servicios públicos tengan que habilitar un tercer servicio para transexuales).
Pero hablando de exclusión, no creo que sea comparable la que se ejerce aquí con los emigrantes, con la que se ejerce allí, con las minorías (de la situación de los americanos nativos [los indios, vamos], ya ni hablamos). Ser negro (o hispano, en ciertos estados) e intentar registrarse para votar es una experiencia no fácilmente accesible, ni recomendable (a pesar de que uno sea americano por generaciones), del acceso a la educación ni hablamos. En cualquier caso, los USA son un país muy grande y muy variado, donde estas experiencias pueden resultar muy diferentes en distintos enclaves. Pero, desde mi punto de vista, puede haber grandes dosis de democracia formal, pero lejos de que la "mayoría" tenga capacidad de decisión, que se encuentra muy secuestrada y a muchos niveles. Aunque no sea el mejor ejemplo, aún recuerdo que un tal Bush, llegó a ser Emperador del Mundo por un puñado de votos dudosos en el que su propio hermano tuvo algo que ver. En cualquier caso, si eres WASP y vives en New York o Los Angeles, es una democracia casi perfecta, claro.
La verdad es que no tengo ni idea de si un negro puede tener problemas para inscribirse para votar en USA. Se me ha ocurrido intentar registrarme online en California y no parece muy difícil. Rellenar un formulario y listo. En el caso de California, las instrucciones de relleno del formulario expresamente excluyen que se informe sobre la raza o grupo étnico. Es posible no obstante que en otros estados sea más difícil registrarse. Honestamente, no tengo ni idea.
ResponderEliminar¡Buena aproximación experimental! Es bastante probable que la nuevas tecnologías hagan bastante por eliminar el componente humano de la segregación. Como ya he comentado, en un país tan vasto las experiencias pueden ser muy diferentes. Yo he conocido otra realidad, pero, probablemente, la casuística es elevada.
ResponderEliminarPor cierto, me ha gustado particularmente ese reconocimiento final tan explícito. Es muy difícil verlo en Internet y, probablemente, todos deberíamos reconocer que nos queda mucho por aprender.
Just in case, yo tampoco soy negro ;-)
@Squirrowl, mi comentario tenía más que ver con el enfoque que apunta Joaquín, el hecho de que un estudio aglosajón ponga por delante nuestra democracia, tan denostada últimamente desde ciertos sectores.
ResponderEliminarEn cuanto a la escala en sí, opino que son magnitudes muy difícilmente medibles y por lo tanto el ranking resulta discutible.
Será cuestión de encontrar definiciones que la mayoría considere válidas, imagino.
Hey, there is a broken link in this article, under the anchor text - el artículo dónde se explica
ResponderEliminarHere is the working link so you can replace it - https://selectra.co.uk/sites/selectra.co.uk/files/pdf/DEMOCRACY_INDEX_2007_v3.pdf