lunes, 30 de noviembre de 2009

Aprendiendo a ver con atención

Comentábamos hace un par de días que lo que vemos está muy influido por el significado que damos a lo percibido. Pero hay más factores, eso tan automático de mirar resulta que es muy complicado. Recientemente en Fogonazos se publicaba un comentario sobre la diferente sensibilidad a los contrastes y a las gradaciones (merece la pena ver los dos vídeos reseñados allí). Para añadir un elemento más un par de vídeos que a mi me resultaron espectaculares, sobre la influencia de la atención.



Y otro:



Parece que si tenemos la atención fija en algo pasaremos por alto cosas mucho más gruesas pero fuera de ese foco de atención. O dicho de otra forma, es muy dificil que veamos algo muy distinto de lo que esperamos ver. Supongo que por eso en ciencia es tan dfícil hacer descubrimientos verdaderamente rompedores.

Por cierto, llegué a estos vídeos a través de una entrada de Genciencia de hace algún tiempo.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Ciencia cotidiana, docencia extraordinaria

Thanksgiving and Chemistry: What's the connection? from ACS Pressroom on Vimeo.



Me encuentro este vídeo y no puedo evitar compartirlo y comentarlo. Por un lado el contenido último es ciencia de la vida cotidiana, que es un tema que me interesa y divierte mucho: Porqué comemos patatas y no papel, etc.

Pero más interesante aún es el aspecto docente. A esa clase si merece la pena ir. O quizá no sea una clase, sino una conferencia. ¿Debe haber diferencia entre una "clase magistral" y una conferencia? ¿Que tal de efectivo será el aprendizaje de los estudiantes con clases de química de este tipo? En estos tiempos de transición al espacio europeo de enseñanza superior es interesante ver lo que hacen los mejores... eso si, yo no me veo con cofia.

Por cierto, el vídeo es del MIT, publicado en su revista.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Uso técnico de términos coloquiales

A la hora de ponerle un nombre a la magnitud vectorial que representa la acción a distancia entre dos masas se utilizó la palabra "fuerza". Desde ese momento tenemos al menos dos versiones de la palabra, una con acepciones técnicas (en física) y una coloquial, en la vida diaria, donde se utilizaba ya con muchas acepciones. Se utiliza el mismo término en los dos sentidos porque tiene un significado coherente, análogo. La similitud entre ambos sirve para entenderse mejor en ambos entornos, por eso es tan frecuente encontrar esas palabras, con su sentido técnico y su sentido coloquial (energía, momento, impulso, frecuencia, etc. etc.).

Pero ese polisemia también es fuente de problemas. Dado que las palabras se entienden en el lenguaje coloquial es fácil crear un discurso pseudocientífico con un contenido técnico inexistente pero plagado de estas palabras polisémicas de forma que al ignorante le pueda sonar a respaldo científico del argumento. No hay más que ver lo que dice la publicidad de la ecobola, las pulseras magnéticas, los desionizadores del aire y demás. Si uno quiere rezar hacia la Meca por cualquier motivación espiritual hará muy bien en hacerlo, pero vestir esa espiritualidad de "lineas de fuerza" o "campos de energía" (a la feng sui) es engañar: no por usar palabras que tienen un sentido técnico el discurso adquiere carácter científico.

He utilizado términos de física porque me son más próximos, pero ocurre lo mismo en otras disciplinas. Como comentaba hace unos días, la "autodeterminación" y la "calidad de vida" en personas con discapacidad son conceptos técnicos de la psicología no triviales, que han supuesto años de trabajo de investigadores para poderlos definir, precisar y esbozar su medida; el mal uso de estos términos de forma coloquial puede resultar tan engañoso como el de los términos físicos. Porque una cosa es que en las ciencias sociales haya aún mucho que hacer (como ya hemos comentado otras veces) y otra cosa es que nada tenga valor.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Aprendiendo a ver

Mira la foto de abajo de las dos adjuntas. ¿A que las sombras parecen la realidad? La de arriba es la foto girada 180 grados, y ahí vemos, reconfortados, que son personajes los que proyectan sombras, como tiene que ser.

(La foto la he visto en Microsiervos, y allí de Erathic Eric)

Acostumbrados a ver las personas hacia arriba y las sombras en el suelo, aunque percibamos lo contrario, lo interpretamos erróneamente. La mirada es un proceso mucho más complejo que un mero registro fotográfico, cuando se ve no se registra, sino que se interpreta la realidad.

Es muy curioso comprobar como, cuando uno intenta copiar un dibujo, no puede evitar transcribir al papel su interpretación de lo que ve. Ese mismo dibujo se copia con mucha más fidelidad si está girado 180 grados, especialmente si con ese giro se pierde la contextualización y se perciben solo formas sin significado.

Esa contextualización de las formas que se perciben para dotarlas de significado parece que es un proceso que se va adquiriendo con los años. O al menos eso se deduce de un estudio que muestra que los niños se engañan menos que los adultos con determinadas ilusiones ópticas. (He sabido del estudio por un twit de ciencia de bolsillo). Cuando mi hijo aprendió la palabra "rodilla" comenzó a dibujar en los monigotes que hacía un círculo en mitad de cada pata. De alguna forma sabía que allí había algo que tenía nombre, y no podía dejar de dibujarlo. A partir de ese momento una pierna era una línea con un pequeño círculo en medio, obviamente por convención, no porque copiase de la realidad.

Los científicos tienden (¿tendemos?) a pensar que uno observa la realidad de forma objetiva y desprejuiciada, y que es así como registra datos sobre los que comenzar a plicar el método científico. Va a resultar que la cosa es un poco más compleja...

domingo, 22 de noviembre de 2009

Accesibilidad testimonial

Empezamos a acostumbrarnos a ver en los ascensores los botones no sólo rotulados visualmente, sino también en Braille. Un mínimo esfuerzo en la fase de diseño de la botonera permite que los ciegos puedan no equivocarse de piso en los ascensores. Dado que la idea parece buena, que se generalice.

Así vemos en el tren (un Alvia en la foto) la indicación de los asientos rotulada también en Braille. Lo que pasa es que en los botones del ascensor se ponen los dedos (que es con lo que se lee el Braille) pero encima de las ventanillas del tren no, y mucho menos pasando por encima de los asientos ocupados. La doble rotulación, Braille y vista, de carteles en las paredes (aulas, despachos, consultas, etc.) raramente es una buena idea. No es razonable esperar que los ciegos vayan sobando las paredes a ver si hay algo que leer. Esos rótulos son testimoniales, parecen decir "también existen los ciegos", pero su función real es nula. La verdad es que no tengo clara la efectividad de esas medidas testimoniales, pero si la necesidad de unos sistemas más efectivos de ayuda a la movilidad de los ciegos.

Ciencias, creencias y encuestas

Encontramos en Magonia una reseña verdaderamente sorprendente. Según la Encuesta sobre percepción social de la ciencia y la tecnología en España (2006), un tercio de los españoles creen que el sol gira al rededor de la tierra. Y sobre esta idea general se puede meter el dedo en la llaga viendo que hay comunidades autónomas donde la cosa llega al 60% mientras que en otras es sólo del 17%. Y aún puede uno revolcarse más en el analfabetismo científico generalizado con preguntas sobre la evolución, la radiactividad, etc.

De entre los cerca del centenar de comentarios en el bog, muchos inciden en lo poco creible de la encuesta. Los resultados son tan exagerados que se hacen poco creibles. Coincido con esta línea argumental: algo debió hacerse mal en las entrevistas a los encuestados. El heliocentrismo nos lo han contado en el colegio a todos multitud de veces, a lo largo de diversas asignaturas y en todos los niveles educativos... Pero por no rebatir el estudio con opiniones, una mirada crítica a sus mismos datos: la dispersión territorial. ¿Cómo puede haber variaciones del 17,5 al 59,4%? ¿La diferencia de cultura científica entre murcianos y canarios puede ser tan abrumadora? Es verdad que la ecuesta etá patrocinada por la FECIT y que se ha hecho sobre 7.00 encuestas... pero algo ha de fallar porque una variabilidad territorial tan inmensa no tiene sentido.

La imagen está tomada de aquí

Congreso sobre atención integral a la discapacidad

Acabando ayer, del 18 al 20 de noviembre, se ha celebrado en Pozoblanco, Córdoba, el I Congreso internacional sobre atención a la dicapacidad y la dependencia (IV jornadas técnicas de Prode).

Allí nos habían aceptado una comunicación (ver programa), en la sesión de "apoyos tecnológicos", titulada "localización para facilitar el acceso de las personas con discapacidad a trabajos itinerantes". La charla la dio, muy bien por cierto, María Equiza, que es la autora principal; ella hizo su proyecto final de carrera sobre el tema. El sistema que presentamos está en estos días siendo implantado en Elkarkide, donde se espera que sirva para mejorar la calidad de vida laboral de 50 carteros comerciales del centro especial de empleo. Habrá tiempo de describibrlo aquí con más detalle en unos días.

Me ha encantado poder escuchar el significado de la autodeterminación de las personas con discapacidad de Mike Wehmeyer, uno de los padres de la idea y su defensa (igual que en su día me resultó revelador el concepto de calidad de vida oído de Schalock). Sin duda Miguel Ángel Verdugo tiene entre sus amigos a los mejores en estos temas.

"Nothing that is right is ever easy" (Wehmeyer). Educar es poner límites, pero un pilar esencial del bienestar, de la calidad de vida, es decidir, elegir, reafirmarte en tu propia vida. Las cuidadoras que asistieron a la charla ponían de manifiesto la dificultad de trabajar por esa autodeterminación en muchas situaciones del día a día. Aún así, si el destino es el adecuado, aunque el camino sea difícil, se avanza.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Cuando la farmacia imita a la homeopatía

Leo una reseña sobre un estudio publicado en el New England Journal of Medicine en el que se acusa a una farmacéutica de referencia de manipular los resultados de algunos ensayos clínicos. No es la primera vez ni la más grave, el caso de 1996 con niños nigerianos fue espeluznante.

A los haituales en la defensa de la ciencia, el escepticismo y el pensamiento crítico se nos llena la boca de críticas a la homeopatía (entre otras muchas... digamos prácticas). Y el punto clave es precisamente que no son capaces de pasar ensayos clínicos al uso.

Los ensayos clínicos consisten en una serie de procedimientos muy finamente diseñados para evitar sesgos (como el doble ciego) y asegurar una efectividad basada en la evidencia. Además hay normativas legales cuidadosas que vigilan que se desarrollen como realmente deben ser. Digamos que el concepto de ensayo clínico se deriva del conocimiento científico y el pensamiento crítico de forma intachable. Pero si su aplicación real incumple los principios se derriba todo el edificio como un castillo de naipes, y acabamos en el mismo sitio, si no peor.

El dinero, cuando se maneja en cantidades obscenas mueve casi cualquier conciencia (salvando a Rick Blaine y algún otro romántico), y el dinero que mueven las grandes farmaceuticas es verdaderamente inmenso. Podemos pensar que casos como estos son anecdóticos y que además acaban saliendo a la luz y hasta siendo objeto de multas millonarias, pero no estoy nada seguro de ello.

Y la falta de una claridad prinstina resulta muy peligrosa: ante la duda razonable (que lo es) cualquiera se siente legitimado para juzgar. Y así nos encontramos con quien ve en la gripe A más una pandemia de miedo incitado para vender medicinas poco útiles que una verdadera amenaza social. Y si el tiempo va dando la razón, luego ve a convencer a esa persona de que la homeopatía no es útil o de que el trasplante para su hijo es la única solución...

La falta de confianza de mucha gente en la "medicina tradicional", y su correspondiente confianza en "medicinas alternativas", me temo que en gran medida es responsabilidad de la propia industria farmacéutica... Ahora que bien pensado, lanzando una buena línea de placebos homeopáticos hasta sacarán beneficio del tema.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

¿Industria cultural?

Leo en Público sobre los sistemas tecnológicos de evitación del espionaje, por parte de las protectoras de derechos de autor, de las actividades en internet que realizan los usuarios. Parece claro que en el mundo digital ya tenemos ecosistemas plenamente desarrollados en los que podemos observar procesos clásicos, como en este caso una "carrera de armamento". El artículo dice en un momento "los resultados dados a conocer la semana pasada son muy preocupantes para la industria cultural". Y ahí me he quedado dándole vueltas. ¿No es un oxímoron eso de "industria cultural"?

En los años 20 (del SXX, claro) mi abuelo Leopoldo aprendía a tocar el violín y le encataba la música, no se perdía ningún concierto que pasara por Valencia. Entonces para óir música había que ir a donde estuvieran los músicos. A lo largo de su vida fue disfrutando de los gramófonos, la radio, los pick- ups, la FM en estéreo, los tocadiscos de alta fidelidad, las cintas de casette... Su afición a la música se desvinculó de la presencia física de los músicos, y pudo disfrutarla de forma mucho más ámplia e intensa que nadie en los cientos de generaciones anteriores a él. Sus colecciones de "discos", en muchos soportes hoy ilegibles, cogen polvo en las estanterías de los nietos. El proceso ha continuado y hoy la disponibilidad de música es más ubicua y universal todavía. La tecnología ha permitido que muchas más personas disfruten de la música.

¿Y los músicos? Ahí el camino no es tan lineal, sino que ha sido de ida y vuelta. Cuando se podía escuchar a la filarmónica de Viena en FM estéreo en tu salón, ¿para que ir a pasar frío a la plaza oyendo a la banda de Burjasot (con todos mis respetos para ellos)? Los discos y la radio generaron una barrera de forma que sólo los elegidos (¿los buenos?) podían pasar. Al otro lado la difusión era mucho mayor que antes, pero muchísimos no entraban. Esa concentración del consumo de música en los canales industrializados creó las estrellas mediáticas: Sinatra, Elvis, Jako, Bernstein... Autores escuchados de manera global. Sin duda los que escuchaban a estos monstruos no iban al bar de la esquina a oír al grupito de su barrio. ¿Fomentó la cultura esa industria de la distribución musical? Sin duda fomentó el control de la producción, la concentración de la oferta y la rentabilización económica máxima de esa producción musical concentrada y controlada, pero ¿aumentó la creatividad? ¿Se le puede llamar industria cultural?

La continuación del avance tecnológico ha destruido lo que una vez permitió construir. La difusión de música por internet ha trastocado radicalmente ese modelo industrial de distribución. Pero en este nuevo modelo un creador local tiene un canal de distribución tan magnífico como la ex- estrella del rock. Y hay múltiples ejemplos de éxitos enormes sin industrial interpuesta. Volvemos al modelo de actividad de principios del XX del músico al escuchante directamente. ¿Ha disminuido eso la actividad creadora? ¿Es malo para la cultura?

A la vista de lo anterior concluyo que, históricamente, la anomalía fue la industrialización de la música, que generó una enorme concentración de la oferta y del dinero (grandes estrellas universales y fortunas obscenas). El mismo avance tecnológico que permitió que se pudiera producir la derriba ahora. Del lado del consumidor, del amante de la música, se ha producido un progreso ininterrumpido de mejora: más música, más disponibilidad, más calidad.

Comprendo que las personas que han hecho fortuna en el modelo de industrialización musical se aferren con uñas y dientes (con abogados y multas) al mismo, pero me extrañaría mucho que se pudiera parar el progreso con esas armas. Y lo que menos entiendo es que no haya ningún político del lado de los consumidores, y que todos estén del lado de la industria. Cuando las etiquetas "izquierda" y "derecha" tenían algún sentido era fácil de etiquetar.

Foto tomada de aquí

martes, 10 de noviembre de 2009

Y más semana de la ciencia: Forges


En El País de hoy

Ya son semanas de ciencia, pero con apellidos

En la entrada de hace unos días comentaba sobre lo poco adecuado de llamarle "semana" a un período de 15 días a propósito de la Semana de la Ciencia.

Resulta que se podía resolver simplemente con una "s" (Semanas de la Ciencia). Sin embargo la cosa se ha complicado, porque a la ciencia le ha salido su habitual compañera de viaje: la tecnología, e incluso la última recién llegada: la innovación.

Así el Diario de Navarra se refiere al evento como "Semanas de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación". Además de preciso hay que ser políticamente correcto, y parece que la Ciencia es una actividad que no debe ir sola por el mundo, resulta demasiado idealista, necesita la referencia a la utilidad y el mercado que denotan las otras dos palabras.

Si, es verdad que me estoy volviendo un poco cascarrabias, comentando sobre temas menores, incluso marginales. Entre otras cosas lo hago para desviar mi inmensa indignación con la próxima aprobación (en viernes 13, eso si) del servicio de inspección del profesorado de la UPNA, así como de la narcotización mental de los afectados encabezada por la Junta del PDI. Stop!

domingo, 8 de noviembre de 2009

pseudociencia y espíritu

Por esos vericuetos 2.0 del google reader y el twitter me llega noticia de la próxima celebración de un interesantísimo congreso.

En el programa encontramos temas de lo más variado: los ponentes revelarán las auténticas verdades sobre cosas tan dispares como la gripe A (vista desde la medicina natural), el 11-S o el SIDA, que resulta ser un montaje "made in USA".

¿Qué tienen en común temas tan dispares? Sólo se me ocurre el enfoque: existe una verdad "oficial", que en realidad es falsa, y sólo unos indivíduos ecogidos están iluminados por la auténtica verdad. Supongo que una vez iluminado por una de esas verdades la generalización debe ser fácil, con lo que uno pasa a creer en todas las versiones iluminadas en vez de en las "oficiales" sobre todos los temas.

No deja de ser llamativa la tendencia intelectual a la reducción extrema: oficialistas o iluminados (igual que la extraordinaria complejidad del gobierno colectivo se reduca a izquiera o derecha). Pero más llamativo todavía me resulta el título que han escogido los iluminados para su congreso: ciencia y espíritu. No encuentro en la web ninguna justificación para el mismo, y aparte de cuestiones más o menos propagandísticas no se me ocurre ninguna. ¿Qué tienen que ver la ciencia y/o el espiritu con que haya o no extraterrestres (tema magnificamente renombrado por los iluminados como "exopolítica")? La misma pregunta se puede repetir para cualquier tema.

Aparte de la incomprensión y la sorpresa (y una cierta hilaridad, porqué negarlo), la extensión de este tipo de pensamiento a lo que me lleva es a la duda científica: ¿qué mueve a tantas personas a semejantes posturas intelectuales? ¿porqué se meten en el mismo saco asuntos tan dispares? La psicología y la sociología no son mi fuerte, pero estaré al tanto a posibles explicaciones verdaderamentes científicas sobre la "ciencia y el espíritu".

martes, 3 de noviembre de 2009

El retablillo de don Cristobal

Salvo los escasos tres años en que la UPNA ha contado con un convenio de financiación, todos los años hemos asistido a una farsa más o menos encubierta. Este año el Consejero de Economía la expone con total claridad: ponemos en el proyecto de presupuesto menos de lo que sabemos qu edebemos poner y esperamos al mercadeo de las enmiendas. Si los entrecomillados del periódico son reales (de lo que no tengo porqué dudar), ha dicho:

"El Gobierno de Navarra sabe que la UPNA debe verse mejor en su financiación respecto a lo que está puesto en el presupuesto"

"Es evidente que hacemos un presupuesto sabiendo que algo se tiene que enmendar. Pensamos, evidentemente, que la partida de la UPNA se va a incrementar"

Esta forma de hacer política creo que difícilmente va a conseguir el prestigio social que merece la gestión de la cosa pública. No sólo la corrupción está llevando a la clase política a ser percibida con horror por los ciudadanos. Ahora que esto es como la telebasura, que todo el mundo la critica y tiene una audiencia espectacular. Mucha preocupación social pero se mantienen las intenciones de voto. A lo mejor es que no hay más opción en la posmodernidad y mercadeo, chalaneo y choriceo son los sustitutos naturales de la ideología a la hora de gobernar. Pues aunque esté anticuado, estos políticos representando farsas de guiñol me repugnan.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Semanas elásticas para la ciencia

La Semana de la Ciencia va a durar dos semanas este año. Hay mucho Galileo y mucho Darwin que celebrar por aquello de los aniversarios; además de lo mucho que la cotidianeidad científica siempre da de si.

Pero ya puestos a una iniciativa tan estupenda, ¿sería mucho pedir no liar? ¿porqué una semana de 15 días?

Ya sé que en la expresión "semana de la ciencia" no se pretende precisión sino hacer referencia a unos cuantos días. Además es una chorradilla, pero aún así no puedo evitar qe me chirrie. Es una cuestión simbólica, si los científicos organizadores del evento no son capaces de encontrar un nombre mejor, ¿que podemos esperar?